TIJUANA.- Andrés Obregón nos da una gran canción con la que cierra todo un viaje de 16 canciones que conforman el disco “La historia completa” este es el gran final. Las cenizas que quedan después de un amor bonito.
“La Historia Completa” de alguna manera es la escena post créditos de una historia de un amor que llegó a su fin. Es la canción que puede ver el proceso de un enamorado y un corazón roto desde fuera de la película que él mismo protagonizó. Con el corazón sano, sin rencor, dolor, ni nostalgia, sino con alegría de tener esos recuerdos y recordar a esa persona con una sonrisa.
Creo que a veces lo único que queda cuando el corazón sanó, son unas ganas curiosas de querer contarle los sueños o anécdotas que han pasado a esa persona que un día creímos que estaría en esos momentos y poder decirle: Me alegro de haber tenido una historia junto a ti y me alegra la historia que tengo ahora. “La historia completa” es una canción escrita y producida por Andrés Obregón.
Cabe mencionar que estará presentándose en la Ciudad de México el próximo 17 de noviembre, donde tendrán la oportunidad de poder disfrutarlo en concierto en el Teatro Metropólitan, donde tendrá grandes sorpresas, cantará todas las historias que lo caracteriza, promete ser una noche inolvidable donde los asistentes disfrutarán de cada una de las canciones de Andrés.
Además se encuentra muy contento porque está llevando su música a diferentes países como Ecuador, Perú, Colombia, Chile, Guatemala, Argentina, El Salvador, Costa Rica, en donde ya muchas de sus fechas fueron Sold Out.
Andrés ha incluido tintes de varios géneros musicales en su propuesta de pop y baladas. Su música se caracteriza por sentirse cercana y real con un sonido actual pero que al mismo tiempo nos trae una nostalgia especial tanto en la música como en la letra, que nos lleva desde lo romántico y el desamor hasta otros temas más profundos, alegres o tristes sobre la vida que hacen que la música del cantante tenga varios colores dentro de cada canción que para él es como esa carta que nunca envió o una fotografías de lo que alguna vez sintió.
